Es de necesidad urbana tener terminales terrestres en cada extremo de la ciudad sirviendonos desde la periferia. Sin querer, los terminales informales saciaron esta necesidad, teniendo a Fiori para el circuito norte, Atocongo para el sur, y Yerbateros para el centro. El terminal de Lima Norte al ser modernizado y realizado mediante una acción conjunta de la empresa privada y el estado (donde antes estaba el paradero informal de Fiori) quizás sea el inicio de una solución para el problema de la informalidad en el transporte interprovincial, que además de los accidentes en carreteras, trae consigo mayor congestion vehicular.

Pero entendemos el porqué existen terminales terrestres informales y formales en pleno centro urbano consolidado, ya sea en zonas comerciales o residenciales, como es el caso del terminal de OLTURSA en la Av. Aramburú, cerca al cruce con República de Panamá, donde quizás esté la sección de vía más angosta de esta avenida, y donde tenemos que soportar el tráfico de la hora punta, la salida y llegada de los buses interprovinciales, la carga y descarga de pasajeros desde vehiculos particulares, los taxistas que no entran al terminal porque este ya está al tope de su capacidad, o a los que se quedan estacionados en la berma lateral esperando que salga algún cliente que les pare el día. Son las autoridades municipales quienes por su limitada forma de ver el desarrollo de las ciudades (donde el bien común esta completamente dejado de lado) autorizan, y hasta promueven este tipo de servicios en ubicaciones que aumentan la insoportable congestión vehicular limeña.

Hace un tiempo me encontré con un estudio previo a la ejecución del COSAC, y en él señalaban que el paradero ubicado en el Estadio Nacional iba a ser muy beneficioso, puesto que "la reciente ubicación en el área de la compañía Soyuz con seguridad atraerá otro tipo adicional de usuarios en la zona, por su gran capacidad de viajes interprovinciales al Sur chico".

(párrafo final en la pág. 7, de la memoria descriptiva inserción urbana estación estadio nacional, de ESTUDIOS DEFINITIVOS DE ARQUITECTURA, INGENIERIA DE LAS OBRAS DE INSERCION URBANA SUR, publicado por PROTRANSPORTE en su web)

No podemos seguir fomentando que el transporte interprovincial se introduzca en el corazón de la ciudad, mas bien deberíamos tener un gran terminal terrestre en cada extremo, conectándolos con los sistemas de trasnporte actualmente en ejecución (Tren eléctrico y Metropolitano): El del Norte en Fiori ya lo tenemos. Faltaría el del Sur, en Atocongo, que debería estar cerca a la estación del Tren Eléctrico. Para el Este podría estar del otro lado del río Rímac (para fomentar su desarrollo e integrarlo aún mas a la ciudad), conectado con las estaciones del Metropolitano o del Tren en San Juan. Y uno final que acabe en el aeropuerto, donde debemos tener ademas, enlace con una futura red del Metropolitano, o con el Tren Electrico, y así también nos olvidaríamos de lo informal de nuestras llegadas internacionales con el folclórico "Sr. ¿taxi?" a manera de bienvenida apenas bajas del avión.

Veamos estos temas de manera integral, no separado en 42 partes de un gran problema (43 si contamos al Callao)